El templo madre de la Fe Bahá'i en Chile será, al igual que los templos ya existentes, una de las maravillas arquitectónicas del mundo. Tendrá forma de tulipán y hectáreas de jardines abiertos a toda la población de forma gratuita para la contemplación y la oración de todos los credos.
Será construído sobre una base de 1.200 metros cuadrados con 30 metros de altura y 30 de ancho, como todo templo bahá'i, la obra no poseerá ninguna imagen y estará abierta a todas las personas que deseen dedicar momentos de oración y meditación.
Poseerá un solo recinto, con un acceso principal y nueve hojas encorvadas que crearán un círculo, donde se dispondrán 600 asientos. Unos cuatro metros más arriba habrá una mesanina y en un nivel subterráneo estarán los aisladores sísmicos.